PROYECTOS DECORATIVOS

martes, 10 de mayo de 2011

Miguel Trillo, el retratista de las tribus urbanas


Con motivo de la exposición Kippenberger miró a Picasso, que se presenta hasta el 29 de mayo, en el Museo Picasso Málaga, se ha organizado el seminario Éxitos y fracasos de la pintura en los años ochenta. En él se reúne a un grupo de protagonistas de aquella década para conocer qué sucedió a partir de sus testimonios. El 4 de mayo se dedicó a galeristas y agentes culturales destacados como Juana de Aizpuru, Pepe Cobo, Norberto Dotor y Tecla Lumbreras. Esta última, en el relato de su experiencia como galerista y espectadora directa de esos momentos, destacó la presencia de este fotógrafo, representativo de la movida madrileña, en su galería. Como anecdota contaba que hacían cola los "punkis" esperando para ver sus fotografías. Entonces me acordé de este artista, nacido en Jimena de la Frontera, un pintoresco pueblo andaluz lleno de encanto, al que recomiendo visitar inevitablemente pues también nací allí.


[foto de la noticia]
[FOTO: Junto a la discoteca La cueva, en una concentración mod, Torremolinos 1991]
Sus tres décadas de profesión le han convertido en testigo privilegiado de la mitificada Movida madrileña, pero también del arraigo de la cultura rapera, de la estética 'mod', 'rockabilly' y 'heavy' entre la juventud de todo el planeta. "El joven puede mentir con la palabra, pero no con la ropa, la ropa le delata", afirma Trillo.

Más allá de la Movida

Al inicio de su carrera flirteó con el surrealismo, pero pronto lo dejó por su verdadero amor, la fotografía documental, con la que enseguida dio en el blanco; sorprende la mirada fija de una casi irreconocible Alaska en 1981, antes de convertirse en icono de la década.
"Una de mis virtudes ha sido haber captado a personajes importantes cuando aún eran embriones", comenta Trillo, que quiere sacudirse el "sanbenito" de fotógrafo de la Movida: "Para mí, la Movida se acabó en 1985. Fueron cuatro años que marcaron mucho, pero esta no es una exposición nostálgica".

Joven Alaska. Concierto de Primavera en la escuela de Arquitectura, 1981. Sección y reproducción de una imagen original de Miguel Trillo.
Joven Alaska. Concierto de Primavera en la escuela de Arquitectura, 1981. Imagen parcial a patir de la reproducción de una imagen original de Miguel Trillo.



[foto de la noticia]
[FOTO: Junto a la discoteca Voltereta, Madrid 1990]


La mayoría de sus retratos tienen un muro de fondo sobre el que se dibujan las figuras: "No sé si elijo primero la pared y luego a la persona o al revés".
Pero siempre sabe lo que busca "he viajado mucho para hacer siempre la misma foto", asegura a propósito de rostros de 'breakers' que, perteneciendo a diferentes épocas (desde finales de los noventa a la actualidad) y lugares (Madrid, Barcelona o Bombay), "seguramente escuchen la misma música".

Imprescindible libertad

"Cuando comencé era casi imposible hacer fotografía documental. La gente pensaba que yo era un 'social', un policía que quería identificarles y denunciarles". Trillo no se cansa de repetir que "él nació con la libertad", cuando sus modelos ya no tenían miedo de dejarse retratar.
Una de sus últimas series también habla de ello. En 'Habaneras', retrata a transexuales y travestidos de Cuba, Filipinas y Puerto Rico que desnudan su condición ante la cámara de igual modo que tienen que ocultarla en su cotidianidad.

Historia de la diversión

El fotógrafo define uno de los murales de una de sus exposiciones, cuajado de figuras de jóvenes contemporáneos, como un "retablo, que en vez de tener santos que sufren mucho", muestra a aprendices del placer y la diversión.
Las tribus son las mismas: raperos, 'heavies', 'mods'... y aunque las estéticas varíen ligeramente generación tras generación, todas tienen en común "el placer del cuerpo vestido", como lo denomina Trillo; el gusto de poder expresar por fuera lo que son por dentro.
[foto de la noticia]
[FOTO: En un concierto de las fiestas del Dos de Mayo, Madrid 1990]

El pulso moderno

Trillo continúa buscando el pulso de lo moderno: "Lo que estoy haciendo ahora se llama 'Gigasiápolis', captar la vida moderna de las ciudades asiáticas".
Para ello ha viajado a Tokio, Manila, Seúl... "Asia, a diferencia de América y Europa, tiene muchos demonios: la religión es un factor determinante, y muchos jóvenes son acusados de 'prooccidentales' por su manera de vestir".
El objetivo de Trillo parece enamorarse como el primer día de la rebeldía juvenil, de una chica con vaqueros ajustados en India o de unas jóvenes occidentales vestidas de alegres colores en Dubai.

by: http://www.elmundo.es/albumes/2009/09/15/miguel_trillo/index.html

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...